Concepto General - Primavera Verano 2023·24
En la tendencia para la temporada cálida, se destacan los modelos abiertos de chanclas y sandalias, con estructuras simples y minimalistas, de máxima funcionalidad y comodidad. Las chanclas de sólo una faja transversal, con suelas delgadas o flats, se imponen sobre las de dos tiras o más, siendo las mules y zuecos de puntas cerradas una alternativa en este segmento. Estas mini-capelladas pueden presentarse lisas, sobrias y elegantes, así como muy coloridas y estampadas. Se tornan indispensables en estos modelos las plantillas anatómicas, identificadas con el concepto Birkenstock, que en esta estación será un fuerte referente de moda.
Otras sandalias con tira de soporte posterior, adoptan capelladas con tiras transversales, o nuevas variables de las clásicas franciscanas o cangrejeras. También continúa la propuesta del modelaje outdoor, con tiras y pasadores triangulares, símil Teva. Los fondos pueden ser delgados, flats y plataformas, donde los volúmenes adoptan formas más esculturales.
En líneas cerradas, predominan las ballerinas, mocasines y zapatillas, en un amplio espectro que comprende opciones clásicas, retro, futuristas e híbridas.
Suman protagonismo por colores, estampas, texturas y tacto. La tecnología aliada a la creatividad ha logrado elaborar textiles y sintéticos de notable valor estético y calidad.
Junto a las pieles y cueros, con acabados lisos, suaves y flexibles, se incorpora una serie de materiales de alto contenido artesanal, donde se destacan diversos grabados -reptiles y geométricos-, perforados, gofrados y sobre todo entretejidos, en versiones mono y multicolores.
Los textiles resultan muy funcionales a la temporada, de allí el intensivo uso de lonetas, brines, gabardinas, jeans, macramés y doble frontura, en colores lisos y estampados. Las tramas abiertas de tules, redes y crochet también cuentan con frecuente aplicación en los calzados de verano.
Los acabados opacos y semi-mate prevalecen sobre los brillos, que quedan reducidos a algunos charoles y metalizados.
Para una mejor protección de los pies, las sandalias y chanclas recurren a materiales y tiras tubulares -de distintos diámetros-, muy suaves y acolchadas.
Los tejidos técnicos como elastanos y neoprenes se utilizan como complementos para un mayor calce de los productos.
Volúmenes moderados en chanclas y sandalias, que comprenden suelas delgadas con y sin taco, y flats con un espesor promedio de 2,5 cms. Se generaliza el uso de la plantilla anatómica para un mayor confort. Los perfiles son rectos igualizados, a menudo con líneas dentadas o track. Se observa una mayor funcionalidad estética de los fondos con las capelladas, de allí la aparición de muchas bases forradas y de distintos colores. Abundan las coberturas de yute, esterillados y símil madera, muy utilizadas en zuecos. Si bien el formato de plantilla con puntas redondas es mayoritario, las cuadradas también son tendencia. Las finas, quedan para algunos modelos de mules y Luis XV con puntas cerradas.
Las suelas para outdoor y chunky incorporan volúmenes y molduras, mientras que las plataformas altas refinan sus diseños. Los fondos cuña y con banda se renuevan en detalles, y siguen siendo clásicos para zapatillas y casuals.
Tacos y tacones altos -finos y anchos- para el calzado femenino, exploran nuevas formas y acabados -pinturas, forros, incrustaciones metálicas y pedrería-, para sumar elegancia y atractivo.
El protagonismo del color en la moda, surge como necesidad de crear estímulos y sensaciones positivas dentro de un entorno crítico. Se profundiza la búsqueda y se abre la paleta cromática en toda su extensión. La tendencia se orienta hacia las tonalidades naturales, saturadas y brillantes, como amarillo, magenta, verde lima y naranja, acompañados por tonos más suaves y relajados como el celeste cielo, rosa y verde menta.
Aunque se reconoce una predilección por el uso monocolor en los calzados, otra alternativa es la disponibilidad de diferentes opciones en estampados florales, animal print y con patrones geométricos, que dan estilo e identidad a los productos.
Hay presencia de colores cítricos, amarillos y naranjas, potenciados en sus versiones flúor, como así también de pasteles suaves y calmos, tales como rosados, beiges, lilas y verde agua. Una práctica frecuente es la exploración de nuevas combinaciones, más allá de las clásicas y tradicionales, teniendo en cuenta que la elección de los colores, además de una razón estética visual, tiene un fin estético emocional.
