Se trata de la marca global KEEN, de Portland/USA, fabricante de calzados outdoor, que se asoció con House of Design, especialista en la integración de sistemas de robótica de Idaho. Ambas compañías crearon el UNEEKBOT, la fábrica de calzados más pequeña del mundo. Dentro de una estructura de 2 mts. de alto por 2,40 de largo y 1.50 mts. de ancho, funciona un mecanismo de alta tecnología que se compone esencialmente de dos brazos robóticos sobre una plataforma de trabajo y varios accesorios personalizados. Mediante un proceso de tejido-enlace de cordones, previamente programado, los robots “tejen” con dos agujas las capelladas sobre la suela. El sistema cuenta con una tablet que controla el robot, permitiendo iniciar y detener el proceso de fabricación e ingresar variables. No obstante, la asistencia humana juega un papel importante a lo largo de todo el proceso, desde la carga de la suela hasta el control final de calidad y los acabados. En el caso de los modelos con soportes traseros o delanteros, por ejemplo, deben ser ensamblados a las suelas antes o después del tejido.
Servicio express y personalizado
El diseño del producto obtenido es minimalista, a gusto del consumidor, que en tiempo real y en el lapso de 15 a 20 minutos dispone del calzado solicitado listo para su uso. Por sus escasas dimensiones, este equipamiento permite a sus propietarios, transportarlo y ubicarlo en diversos lugares. Para los consumidores, resulta una nueva experiencia respecto a las tiendas tradicionales, donde pueden acceder de manera directa a la elaboración de su calzado según las características solicitadas. Con un costo de 300 mil dólares por cada unidad de producción, la compañía KEEN ha invertido en tres UNEEKBOTS, que fueron ubicadas en su sede de Portland/USA, otra en Tokio, Japón, y la restante en Países Bajos.
