Al cierre de 2023, podría primar una percepción de un año “aceptable” en la industria del calzado, debido al alza en las ventas locales y al exterior, y empleo estable. Puntualmente para el segundo semestre, el sector se mantiene en un “optimismo cauteloso”.
La competitividad en el ámbito global, se basa en la supresión de los aranceles aduaneros y un incremento en el libre comercio, según los fabricantes de calzado. También entienden en que no es momento para que los legisladores sumen regulaciones, como las lanzadas por la Unión Europea, sino en generar el apoyo que el sector demanda.
La industria se enfrenta a una alta inflación e índices económicos endebles, además de la burocracia implementada por Berlín y Bruselas, que sobrecarga a las pequeñas y medianas empresas, informó la Asociación Federal de la Industria Alemana del Calzado y Marroquinería (HDS/L).
¡Escríbenos! marketing@serma.net