Haroldo Ferreira -presidente ejecutivo de ABICALÇADOS- detalló que 8 de cada 10 zapatos son importaciones asiáticas, a lo cual se sumó la información elaborada por la entidad, que demuestra que Asia ha incrementado las ventas de calzado al mercado brasileño.
“Este es un hecho que genera preocupación, pues estos productos muchas veces se venden a precios inferiores a los practicados en el mercado, provenientes de una industria que no respeta los convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ni los conceptos más básicos de sustentabilidad”, afirmó el líder.
Ferreira agregó que este calzado genera dificultades a nivel de derechos humanos y medio ambiente, paralelamente a significar una competencia desleal con la industria local.