Mediante un comunicado distribuido el 13 de Noviembre de 2018, la compañía ALBANO anunció el cierre de su fábrica en Concepción, a 500 kms. al sur de Santiago.
Su gerente Cristian Aravena manifestó que la determinación se debió a la “irrupción del producto asiático” ocurrida hace 10 años, la cual resintió al mercado “muy sensiblemente, al punto que hemos visto cómo reconocidas empresas en Chile y en el extranjero -como GACEL y CAPRICE- cerraron sus actividades, producto de la competencia implacable y descarnada”.
A tono con lo expresado, el directivo señaló en el documento que “los exiguos márgenes y las casi nulas rentabilidades han minado la noble producción de calzado en Chile y en la región del Bío Bío”.
También, agregó que a pesar de las complicadas condiciones comerciales de los últimos cinco años, la compañía mantuvo las operaciones de la fábrica a la espera de alguna mejora en el sector del calzado, lo que finalmente no ocurrió.
Mantienen estructura comercial y asumen compromisos con los trabajadores cesantes
Además explicó que “el área de ventas, con sus locales de venta directa al público, va a mantener sus operaciones normalmente”.
Con similar criterio, aseguró que a los trabajadores de la empresa que sufren la pérdida de su fuente laboral se les “cumplirá efectivamente las condiciones contractuales y se realizan desde ya gestiones para concretar la re-especialización o la reconversión laboral de todos los operarios”.
Finalmente, el texto agradece a todos los colaboradores de la fábrica, a quienes se les reconoce por dar una “batalla de supervivencia y esmero, en obtener un producto de alta calidad y desarrollo, el que logramos posicionar en nuestro país”.