DURO GOLPE para la industria del calzado de España
Entre uno de los países más perjudicados por la crisis del coronavirus, España intenta normalizar sus actividades lentamente. El sector industrial, y en particular CALZADO y manufacturas, donde en la zona de Alicante posee su mayor concentración, ha sido uno de los más golpeados a causa del cierre generalizado de tiendas en todo el país y al descenso pronunciado del consumo de calzado, en orden de prioridades por productos de alimentación y sanidad.
Como consecuencia, el retorno a la actividad se dificulta por la falta de pedidos y la escasez de elementos de protección, como mascarillas, guantes, etc. dentro de un protocolo de prevención muy riguroso que se debe implementar.
La esperanza de muchas fábricas que exportan es la reapertura de algunos mercados internacionales como Austria y Rusia.
La Federación de la Industria del Calzado de España -FICE-, ante la prórroga del estado de alarma decretado por el gobierno hasta el 26 de Abril, solicita en carácter de urgente un paquete de medidas para aliviar la angustiante situación por la paralización de las producciones, causada por la caída drástica de la oferta y demanda de bienes y servicios, por imposición legal a causa de motivos sanitarios.
En este marco reclaman la suspensión del pago de tributos y la inmediata liberación y ampliación de créditos a 50 mil millones de euros, con avales del gobierno. Se agrega el pedido de flexibilización y extensión de los ERTE’s, -Expediente de Regulación Temporal del Empleo-, un instrumento legal que permite a las empresas prescindir temporalmente de sus obreros y eximirse del pago de sueldos durante el tiempo que permanecen fuera del puesto de trabajo.
Gran parte de las medidas exigidas, apuntan a mitigar situaciones extremas en el sector de pymes y autónomos.
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