Yolanda Díaz -ministra de Trabajo-, comunicó la intención de disminuir la jornada laboral a 38.5 horas en una primera instancia, y a 37.5 horas en una segunda fase.
A esto se le sumarán otras medidas, como que algunas categorías de empleados implementen un alza en las contribuciones a la seguridad social y la imposición para sostener el nivel de empleo.
Desde FICE se han mostrado en desacuerdo y con gran inquietud, debido a la falta de flexibilidad según los sectores y a la posible pérdida de competitividad. La entidad aseguró que no hubo diálogo ni acuerdo entre los actores implicados.
Las previsiones son de cese de actividades en las empresas y desempleo, ya que la iniciativa del ministerio conlleva un incremento en los costos de manufactura, seguido de un alza en los precios al consumidor final, informó FICE.